En los encuentros previos, Venezuela empató 1-1 con Uruguay, mientras que Brasil venció 2-1 a Perú, para lograr sus pasajes al Mundial a desarrollarse entre el 17 de octubre y el 8 de noviembre.
El combinado local salió a buscar el triunfo desde el comienzo con la apuesta ofensiva que lo caracterizó a lo largo del hexagonal final: 3 defensores, 4 mediocampistas con llegada al arco rival y 3 delanteros.
Con este esquema, más las ganas de los chicos de querer obtener el boleto al mundial, Argentina tomó el protagonismo del partido y lo manejó con gran criterio.
Si bien Argentina no sufrió quebraduras en su juego y planteo táctico, Paraguay se las ingenió para llegar por única vez en esa primera etapa al arco defendido por Augusto Batalla: una jugada colectiva aislada de los guaraníes, a los 18m., terminó en un centro desde el sector izquierdo que por poco no lo logró hacer efectivo el delantero Antonio Sanabria, quien se encontraba a un metro de la posición del arquero.
Luego de este pequeño sobresalto, Argentina se puso en ventaja 7 minutos después: el volante de Boca Iván Leszczuk se sacó a un rival de encima con sombrero incluido, se acomodó y, desde afuera del área, ensayó un potente remate que se transformó en gol a pesar de la estirada del arquero Echagüe.
Así, Argentina consiguió aumentar la diferencia a los 35 minutos: tras un centro desde la derecha de Astina, el balón cayó en la posición del delantero de River Driussi, quien logró cabecearlo y debido a un grosero error del arquero (se le escapó de las manos), se consiguió el 2-0 a favor.
El resto del primer tiempo se siguió jugando en campo paraguayo y así fue que a los 39m. y luego de un centro al área, el defensor guaraní Diego Marín tomó del cuerpo y derribó en el área al delantero de Newell´s Old Boys Franco Pérez y el arbitro chileno Carlos Ulloa marcó penal.
Un minuto más tarde, el delantero de Lanús Marcos Astina cambió el penal por gol y Argentina se fue al descanso con una supremacía absoluta, tanto en el marcador como en el juego.
En el inicio de la segunda etapa, Paraguay, que estaba obligado a ganar para intentar acceder a una de las cuatro plazas rumbo al mundial, probó con los ingresos del enganche Jesús Medina y el volante Santiago López, quienes no lograron cambiar la pálida imagen mostrada por el equipo durante los primeros 45 minutos.
Los paraguayos tuvieron dos posibilidades en las que participó el delantero Antonio Sanabria: en la primera el ´uno´ argentino logró llegar antes que él al balón y en la siguiente Batalla salvó el gol con una gran intervención.
Con estas llegadas, Paraguay tomó un poco más de confianza y así llegó al descuento cerca del final: a los 43m. y luego de una mala salida de la defensa argentina, el ingresado Santiago López tomó el balón y aprovechó su velocidad para llegar rápidamente al área argentina y definir al palo derecho del arquero y sellar el 3-1 a favor de los locales.
Con este resultado, el conjunto dirigido por Humberto Grondona logró clasificarse al mundial de la categoría en Emiratos Arabes Unidos luego de una primera fase en la cual el equipo fue muy criticado por su flojo nivel futbolístico, algo que creció en el hexagonal final, sin demostrar grandes cualidades pero logrando el objetivo que se propuso antes de iniciado el torneo.
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