Central venció a Aldosivi y festejó el ascenso en su casa

(Télam).- Rosario Central venció con justicia y comodidad a Aldosivi por 2 a 0, en un discreto encuentro jugado esta noche por la 35ta. fecha del torneo de la B Nacional, ante más de 45 mil hinchas que festejaron en el Gigante de Arroyito la vuelta a Primera División lograda hace una semana en Jujuy.

Apenas habían jugado siete minutos cuando Diego Lagos y el paraguayo Néstor Bareiro presionaron sobre la izquierda y ganaron un tiro de esquina que el pibe Rafael Delgado le puso en la cabeza a Nahuel Valentini, quien la clavó en el ángulo superior izquierdo del arco de Pablo Campodónico, en la primera gran explosión del Gigante de Arroyito.

Central jugó por primera vez con la tranquilidad de haber logrado el ascenso, esperó en su campo, tocó la pelota por abajo y atacó cuando pudo, como a los 21` cuando el ahora ovacionado Javier Toledo remató de zurda desde el borde del área y Campodónico salvó abajo, hacia su derecha.

Aldosivi casi no pateó al arco, al extremo que sus únicas llegadas del primer tiempo fueron un derechazo apenas alto de Nicolás Miracco, a los 20`, y otro de Matías Gigli, atajado por Mauricio Caranta, a los 29`.

Central dominó el trámite a voluntad más aún en el complemento y liquidó el pleito a los 8` cuando Toledo le ganó a Walter Zunino por la izquierda y asistió con maestría a Néstor Bareiro, quien la tocó de zurda al segundo, en medio del delirio canalla.

El partido estuvo detenido dos veces por los fuegos artificiales arrojados por la barra brava `canalla` desde la tribuna, primero, y desde el parque Alem, situado detrás de la popular de Regatas, después, mientras el resto de los hinchas del Gigante los repudiaba al grito de "que se vayan todos, que no quede, ni uno solo...".

Central fue muy superior con el gran partido individual y colectivo de sus jugadores, al punto que Aldosivi sólo llegó con un contrataque de Enrique Secaffién, salvado por Caranta, en el segundo minuto de descuento.

Antes del encuentro, los canallas festejaron el ascenso con una fiesta que incluyó la llegada de los jugadores en un helicóptero que aterrizó en el campo de juego, donde antes habían bajado los músicos auriazules Juan Carlos Baglietto y el `Pájaro` Gómez, quienes cantaron la marcha del club y otras canciones junto a todo el estadio.

Y después del partido, la fiesta continuaba con una gran caravana liderada por el `canallabus`, el colectivo descapotable que trasladaba a los jugadores desde el Gigante de Arroyito por la costanera rosarina hasta el Monumento Nacional a la Bandera, seguido por miles de hinchas que festejan el ascenso desde hace una semana, cuando las autoridades calcularon que unos cien mil celebraron en el ícono de la ciudad.