sábado, 23 de junio de 2012

Volver a vivir



363. 363 fueron los días que espere este momento. Escribir, después de festejar, sabiendo que River volvía a Primera. Casi un año pasó de ese momento nefasto como fue perder la promoción. Verlo perder con Aldosivi, con Boca Unidos, con Atlanta y con Patronato fue difícil. Ver que se lo empaten sobre la hora Quilmes, Aldosivi y Guillermo Brown fue complicado. Un año larguísimo. 38 fechas que parecieron 70.

El hincha de River sufrió demasiado. Me enfermé más veces en este año que en 17. Pasé por todo dolor estomacal posible, dolores de cabeza, depresión por un resultado no deseado. Esto es fútbol, ya sabemos. Pero para el hincha de River esto ya era cuestión de vida. No servía que tus amigos o cualquier persona que te veía, te diga –No pasa nada, no te preocupes, es fútbol- Sí, ya sé que es fútbol, pero a la vez no es fútbol, es River. Es lo más grande del mundo después de mi familia. No hay nada como River. No hay nada como ver el Monumental. No hay nada como ver a la hinchada.

Pasé y pasamos por millones de cargadas. El ahora recuerdo de que tribunas de equipos como Guillermo Brown, Desamparados, Atlanta, Chacarita, Patronato, Almirante Brown, Deportivo Merlo, Aldosivi, Defensa y Justicia, gritasen Vos sos de la B! Vos sos de la B!, es increíble. Pero River lo sufrió, el hincha de River lo sufrió. Que tus amigos te pregunten, -¿che, hacemos algo hoy?-, y que tu respuesta sea, -No sé, no tengo ganas- me pasó muchas veces. Acostumbrarse a que tarados de cualquier equipo se diviertan escribiendo River con b. Disculpen tarados, River es River.

363 días esperando este momento. De nada va a servir que la dirigencia se siga mandando macanas. Jugaron con el hincha haciendo competencia de apretar F5 a cada rato. Si River se termina de acomodar dirigencialmente y de dejar de cometer errores con los Borrachos del Tablón, con las contrataciones, etc., River va a hacer una buena campaña en Primera porque ahora la presión es mínima. El jugador ya no va a jugar con una sombra que le diga, -Si te meten un gol ¿qué quilombo se va armar, no?

Y hay que agradecer señores. Gracias Cavenaghi, gracias Chori, gracias Almeyda (aunque de fútbol, poco y nada), Gracias David, gracias jugadores, gracias a todas esas almas millonarias que, desde cualquier rincón del país, alentaron y alentaron en las malas mucho más. Volvió River señores, volvió el Millonario. Ya puedo decir que volví a vivir. Gracias