(EFE).- Olimpia
necesitó once años para alcanzar su séptima final en Copa Libertadores, torneo
en el que ha jugado en 37 de las 54 ediciones disputadas, y pese a perder hoy
en Bogotá por 1-0 ante Independiente Santa Fe de Colombia.
Ahora el Decano del fútbol paraguayo,
que ha conquistado tres veces la Copa Libertadores, esperará en la final al
mejor del mano a mano entre Newell's Old Boys y Atlético Mineiro, que se
definirá este miércoles en Belo Horizonte.
Aunque Independiente Santa Fe ganó hoy
por 1-0 con anotación de Wilder Medina en el minuto 75, no le alcanzó para
cambiar la tendencia que favorecía al franjeado por haber ganado hace ocho días
en la ida por 2-0.
El equipo bogotano buscaba llegar a la
primera final del torneo continental de clubes pero se estrelló con un rocoso
rival que esta vez no fue tan punzante en ataque.
En el primer tiempo Olimpia pudo
sorprender a los tres minutos con un remate del punta Enzo Prono, que desvió al
tiro de esquina el guardameta Camilo Vargas.
De ahí en adelante el albirrojo tomó
el control y creó las mejores oportunidades de gol.
Carlos Valdés, Jefferson Cuero, Wilder
Medina y Cristian Martínez Borja estuvieron muy cerca de poner en ventaja al
Santa Fe.
El zaguero Valdés vio desviado por una
pierna su remate que iba camino al fondo de la red y Medina, que por milímetros
no la embocó con vistosa chilena, también pecó por falta de puntería frente a
la portería desguarnecida.
El delantero Martínez Borja, que entró
a los seis minutos en sustitución del creativo argentino Emanuel Molina, pudo
anotar de cabeza.
En el segundo tiempo, más de lo mismo.
Las oportunidades cayeron del lado de los centrocampistas Yulián Anchico y Omar
Pérez, y una más de Medina.
Hasta que su gol, que abrió un pequeño
debate sobre el paso del balón sobre la línea final, llegó a los 75 minutos
tras un tiro franco del argentino Pérez.
Con el 1-0 a favor el conjunto
colombiano buscó por todos los medios la segunda anotación que llevaría la
seria a una tanda de penaltis, pero Olimpia resistió a partir de una soberbia
noche del guardameta uruguayo Martín Silva.
No hay comentarios:
Publicar un comentario